Sobrevivi a la primera semana

¡Hola! ¿Qué tal? Yo muy cansada, esta semana ha sido muy larga y llena de cosas nuevas, pero ¡he sobrevivido!

 

Hoy tengo libre al igual que ayer asique voy a aprovechar para contaros como han sido los primeros días por aquí.

 

El lunes cogí el avión con mucha ilusión, las despedidas como siempre son difíciles, pero las ganas y la ilusión podían con todo. No se si alguna vez os conté que tengo pánico a volar, por lo que los 45 minutos antes de embarcar creo que fueron los peores de mi vida, pero todo he de decirlo el vuelo fue muy bueno y no me entere de nada, cuando me quise dar cuenta ya estaba en Londres.

 

Una vez me baje del avión llegaron los primeros inconvenientes. Me encontraba mas perdida que un pulpo en un garaje, no sabia si primero se recogía las maletas o se pasaba el control de pasaporte o que. Poco a poco me fui aclarando y conseguí llegar a los ascensores que me llevarían al autobús. Media hora para conseguir bajar a la estación de autobuses ya que entre lo cargada que iba y que los ascensores no funcionaba por un momento creí que lo perdería. Conseguí llegar y por fin me pude relajar ya estaba en el autobús camino de Oxford.

 

El primer encuentro con la familia fue muy bueno. En la estación me esperaban la mama y los dos pequeños y ambos me recibieron con alegría. Paramos a comprar algo de comer y tiramos para la casa. Ellos habían llegado el día antes de vacaciones por lo que también andaban instalándose. Llegamos, comimos y yo me subí a mi habitación para empezar a deshacer maletas y colocar cosas. Cuando termine y baje ellos se iban a la biblioteca a coger unos libros para los niños y me ofrecieron ir, por supuesto acepte y aproveche para hacerme el carnet. Cuando llegamos todos los subimos a descansar y cuando llego el padre de trabajar e hicimos las pertinentes presentaciones cenamos y por fin se acababa el primer día aquí.

 

El martes fue el día mas duro de la semana. Por motivos de horarios los padres no pudieron quedarse conmigo como estaba previsto y estuve todo el día sola con los niños. Se portaron muy bien y el mayor me ayudo mucho pero desde las 7 de la mañana que estábamos despiertos hasta las 7 de la tarde que llegaron ellos fue un día muy largo. Por la noche salí con el padre a dar mi primera clase de conducir y bueno para ser la primera y de noche no se me dio nada mal.

 

El miércoles por fin empezaba el colegio de los niños. Ese día estuve con la madre. Fui conduciendo yo hasta el colegio y juntas los dejamos y volvimos para casa, practicamos un poco mas y nos retiramos cada una a hacer nuestras cosas, yo a descansar un poco y ella salió a hacer varios recados. La tarde fue de locura, ella llego algo tarde de los recados por lo que cuando llegamos al colegio no había aparcamiento y tuve que esperar en el coche a que ella recogiera a los niños. Llegamos a casa comimos volando y salimos para la primera actividad extraescolar del mayor: tenis. Todos los trayectos en coche los hice yo y bueno ella es mas nerviosa que el padre lo que me hace ir mas tensa y fallo mas, pero estamos vivos por lo que no se me dio tan mal.

 

El jueves era nuevo día de colegio. Esta vez seria el padre quien estuviera conmigo y tuvimos la misma rutina que el miércoles: yo conducía y juntos los dejábamos en el cole. Esa mañana fue diferente, ya que una vez empezó mi tiempo libre cogí mi primer autobús en el pueblo y me dirigí hacia Oxford. Allí por fin conocí a Mari y juntas hicimos varias gestiones, banco, tarjeta de autobús etc. Fue una mañana muy amena pero al volver me equivoque de parada y tuve que andar mas de 20 minutos hasta que encontré la casa. Por la tarde todo fue normal, mientras el padre trabajaba desde casa yo me encargaba del baño y las tareas de los niños.

 

Y sin casi darme cuenta ya estábamos a viernes. Como aun no andaba segura con el coche por la mañana vino el padre conmigo aunque en cuando nos dejo en el colegio se fue corriendo a trabajar. Una vez en casa empecé con las tareas que me correspondían, puse una lavadora y una secadora y pase la aspiradora a la casa. Cuando acabe comí y salí andando para el colegio para recoger al pequeño, ya que el mayor tenia futbol y se iba con un amigo. La tarde del viernes también fue larga, el niños se porto muy bien pero es muy inquieto y es bastante difícil de entretenerle mucho tiempo. Por la noche y cuando ya los niños se encontraban durmiendo, me reuní con los padres y me contaron mis tareas y como debía ser todo, ya que en la próxima semana ya estaría sola con todo.

 

Con la semana terminada, llegaba mi tiempo libre. El sábado volví a quedar con Mari y fuimos de turismo por Oxford, aunque de esto ya os hablare en otro post, y hoy domingo estoy aprovechando para descansar y coger fuerzas para toda la semana ya que mañana empieza la aventura de verdad: ¡yo sola ante el peligro!

 

Antes de despedirme quiero comentaros que el wifi de la casa es bastante malo por lo que mis intenciones de actualizar el blog todos los días no se si va a ser posible. Esperemos que se porte bien conmigo y me deje publicar.

 

Y hasta aquí mi semana. Gracias a todos por vuestro mensajes de animo en el ultimo post y por seguir ahí día tras día.

 

Nos leemos cuando el wifi me deje

 

Un beso

 

Serezade